ENTREVISTA En exclusiva para Mundotoro del diestro albaceteño Sergio Serrano
¡Qué bonita la vida! Sobre todo, cuando el sacrificio y la lucha tiene su recompensa. Cuando el esfuerzo por alcanzar un sueño no decae. A comienzos de la temporada pocos contaban con Sergio Serrano más allá de su admirada y querida Albacete. Así temporada tras temporada. Pero tan sólo en dos semanas, con una actuación en Albacete y otra en Madrid, el nombre de Sergio Serrano cotizó en alza. Pero toda su carrera tiene una historia detrás basada en el ostracismo y la dureza de la profesión que ahora cuenta para Mundotoro. Todo cambia. Nada es para siempre.
‘Si en Madrid y en Albacete no hubiera pasado nada, tenía las maletas preparadas para irme’, asegura Sergio Serrano. No es fácil renunciar a una forma de vivir. De su testimonio se desprende la dureza de la profesión, su lucha constante por conseguir una oportunidad. ‘Estaba contento con mi profesión, mi carrera, la forma de afrontarla y mi preparación, pero hay un momento en la vida en el que hay que ser muy consciente: el toreo está muy mal y necesitaba el handicap de Madrid para que mi nombre empezará a sonar. De haberse dado mal las cosas, habría sido muy difícil volver a Las Ventas‘, asegura.
La serenidad y la consciencia marcan el ritmo de la conversación. Sabe de dónde viene y el camino que ha recorrido hasta llegar a este momento. ‘La semana previa a mis dos citas –Albacete y Madrid– hablaba con mi mujer por las noches cuando no podía dormir y me preguntaba que «a qué le estaba dando vueltas». Le dije que Madrid era la única que me podía cambiar la moneda, porque esperar 364 días para volver a Albacete, a la que siempre voy a estar agradecido, ya lo había hecho muchos años y si las cosas salían mal, era el momento de decir adiós’, afirma con honradez y cercanía.
‘En Madrid, cuando me quité el vestido de torear en el hotel me sentí muy tranquilo de lo que había hecho en la plaza’
Elegir a un equipo que luche por un torero es crucial en la mentalización. Están en las buenas y en las malas. ‘El maestro Alfonso Romero ha tenido gran parte de culpa para no tirar la toalla. Hasta el último momento ha confiado en mí y me ha apoyado cuando incluso yo no estaba tan seguro de las cosas, dándome una nueva visión de lo que es el toreo, sobre todo, en esas jornadas de invierno, donde precisamente lo conocí. Gran parte del triunfo se lo debo a él y a la cuadrilla que tantos años ha pasado conmigo’.
Apenas dos tardes separan a Sergio Serrano del ostracismo a que su nombre haya empezado a sonar. Dos tardes cuya presencia estuvo pendiente de un hilo hasta el último momento. ‘Los días previos fueron muy duros, porque me cogió un toro a puerta cerrada en la finca de Torrestrella y me provocó una grave lesión en la espalda y el hombro de la que todavía me estoy recuperando. Sin embargo, estoy convencido que debe haber un Dios ahí arriba. Fueron días de lágrimas, de largas sesiones de fisioterapia pensando que no iba a llegar a los compromisos y al final, sin estar al 100%, pude hacer el paseíllo y cambiar la tónica general de mi carrera‘, asegura ilusionado.
MADRID Y ALBACETE: EL DESTINO DE SERGIO SERRANO EN MANO DE DOS CARTAS
El italiano Nicolás Maquiavelo aseguró una vez que nada grande fue jamás conseguido sin peligro. El término arriesgar está condicionado con la valentía. No hay ningún acto de valentía superior a ser torero pues es uno mismo el que decide arriesgar su destino y su vida, venciendo a la vez un miedo. Sergio Serrano tenía el destino de su carrera en dos citas: Albacete y Madrid. Un triunfo suponía un giro en su carrera, mientras que la indiferencia le conducía al adiós.
‘La verdad que es duro cuando tu futuro está en manos de esas dos tardes y sientes la sensación que tiene que pasar algo o si no tienes las maletas hechas para irte. Quizás tengo a mi favor que ya llevo muchos años de matador de toros y aunque he toreado poco, al final todo te curte’, asegura el diestro albaceteño.
‘Los días previos a las corridas fueron unas jornadas de lágrimas y de largas sesiones de fisioterapia pensando que no iba a llegar a los compromisos por una lesión en el campo’
‘Esta temporada pretendía que la gente me viera y mi nombre sonara que es algo que he conseguido. La corrida de Torrestrella en Albacete me permitió cuajar una gran tarde y luego en Madrid pude dejar la impronta, siendo de una tarde difícil, de querer que cuenten conmigo’.
‘La de mi tierra -ahondando en la pasada Feria de los Llanos de Albacete– fue una tarde muy bonita. Ver a tus paisanos y a la gente que quieres con una cara de felicidad cuando miras los tendidos es algo maravilloso. Además, el quinto toro me permitió disfrutar, abandonarme y romperme toreando’, afirma con una sonrisa, rememorando los recuerdos en su cabeza.
‘En Madrid fue todo más distinto y cuando me quité el vestido en el hotel me sentí muy tranquilo de lo que había hecho en la plaza. Con un lote muy difícil, pude demostrar las ganas de querer’. ‘No me esperaba la respuesta y el revuelo que se ha generado, pensando que son sólo dos tardes, en las que se ha visto una buena dimensión pero sin matar los toros’, admite.
SERGIO SERRANO Y EL OSTRACISMO, UNA LUCHA EN EL ANÓNIMATO
Existen historias alejadas de los grandes focos llenas de sacrificio y dureza. Una lucha día tras día en el anonimato, que en ocasiones carece de reconocimiento. Vivir siendo torero, pero sin tener la posibilidad de vestirse de luces. ‘Es verdad esa frase que dice que el banquillo te curte o te pudre. El tiempo te permite pensar y analizar muchas cosas, pero, luego, hay algunos momentos que las cosas no salen. Lo más importante es que todo llegue en su momento, eso es muy importante y lo digo a ciencia cierta’, asegura Sergio Serrano.
‘En el toreo a nadie le regalan nada y al final el tiempo parado te da madurez y poso. Está claro que un torero se hace toreando, pero sí que es verdad que el tiempo te hace también crecer personalmente. Venía muchos años sin torear o toreando una. Siempre confiaban en mí la empresa de Albacete, pero no me posibilitaba cambiar mi destino y mi situación’.
‘Tengo por delante un invierno muy ilusionante, pensando que el año que viene no tengo que esperar tanto para vestirme de luces’
‘La afición, el amor al toro y a la profesión han sido las bases para no tirar la toalla. Más que una profesión, el toreo lo considero como una religión. El amor a una forma de vivir te mantiene vivo año tras año. Seguía entrenando y yendo al campo, aunque sin mucha asiduidad. Todo eso te hace crecer, pero llega un momento en tu vida, que si no funcionas tienes que tirar por unos derroteros. Al final uno tiene una familia y se hace muy duro cuando tienes que compaginar esta profesión y un trabajo’.
Vestirse de luces para Sergio Serrano, además de ser un privilegio, es una liturgia. ‘El sentirte y vestirse de torero es algo que llevas por dentro y lo necesitas. Es tu felicidad y tu manera de sentirse vivo. Ser torero es lo más bonito y a la vez puede ser lo más desgraciado que te puede pasar en la vida’, ríe el diestro albaceteño.
La vida le ha sonreído a un torero de Albacete que en los años de olvido tuvo que buscar salidas laborales. ‘Tengo la suerte que un hermano y una cuñada tienen una empresa y trabajaba con ellos de comercial. Eso me ha permitido trabajar en la calle, que es algo muy duro, pero también madurar y tener salidas a la hora de tratar a la gente’.
‘El toreo lo considero como una religión y ese amor a una forma de vivir es la que me mantuvo vivo año tras año’.
‘Al conocer mi situación eran sensible y cuando me salen los tentaderos puedo faltar al trabajo y lo puedo compatibilizar mejor’, asegura.
INVIERNO DEL 2020, UNA PRECAMPAÑA ILUSIONANTE PARA SERGIO SERRANO
‘Al final creo que después de mucho tiempo, tengo por delante un invierno muy ilusionante, pensando que el año que viene no tengo que esperar tanto para vestirme de luces y, sobre todo, no tener que agarrarme sólo a la oportunidad de Albacete‘.
Incluso estos dos golpes en la mesa le han valido para que varios apoderados se interesen para gestionar su carrera. ‘Ahora tengo que escuchar todas las opciones de la gente que se ha interesado por mí,
ver las posibilidades de cara al año que viene, pero parece que en apenas en unos días se ha dado la vuelta a la tortilla’, concluye.
Fuente: mundotoro.com